¿Tienes la convicción de que tu pareja te es infiel, y esto te lleva a revisar su teléfono una y otra vez? Entonces es hora de enfrentarte a la realidad de que podrías padecer de celopatía un trastorno que te alejará de la posibilidad de vivir una relación amorosa plena y saludable. Y esto no es todo, ya que cuando los celos se tornan excesivos, las consecuencias se hacen sentir en varias áreas de tu vida. Préstale especial atención a este problema, porque podría poner en peligro algo más que tu vínculo romántico.
¿Qué es la celopatía?
Hablar de celopatía es hacer referencia a la obsesión de que nuestra pareja nos es infiel, sin que exista evidencia alguna de este hecho. Por lo tanto, el sentimiento de desconfianza surge de manera espontánea y sin ningún indicio que lo detone.
En términos estadísticos, los hombres padecen este trastorno delirante en mayor medida que las mujeres y es un trastorno que surge por causa de múltiples factores.
¿Cuál es la diferencia entre los celos comunes y los celos patológicos?
Sentir celos es normal, pero dicha normalidad viene dada por las circunstancias. Es decir, si tenemos constancia de que nuestra pareja le está prestando más atención de la debida a una persona que podría convertirse en su pareja, no es de extrañar que los celos comiencen a corroernos.
Sin embargo, los celos patológicos surgen de la nada y son permanentes. Además de ello, conducen a que se genere una sensación de hostilidad con nuestra pareja, lo cual crea tensiones que podrían ser mucho más peligrosas para la relación que la supuesta aparición de otra persona en escena.
¿Cuáles son las causas más comunes de la celopatía?
Los celos patológicos encuentran su origen en diversas causas. Las más comunes son:
Infidelidades anteriores
Ya sea que en una o en varias ocasiones tus parejas anteriores te hayan sido infieles, esta es una causa que puede explicar por qué sufres el síndrome de Otelo, como también se la conoce a la celopatía.
Dependencia emocional
Cuando dependemos de nuestra pareja, tendemos a creer que nuestro compañero emocional nos pertenece. Por lo tanto, cualquier actividad o espacio que no comparta con nosotros se vuelve un motivo de desconfianza.
Inseguridad
Creer que no somos merecedores del amor de la persona que tenemos a nuestro lado es también un fuerte detonante de los celos patológicos, ya que vivimos con el constante temor a perder a esa persona ante la aparición de alguien que realmente la merezca
Baja autoestima
La falta de amor propio nos pone en una situación de desventaja, y, aunque esta sea imaginaria, esto hace crecer la desconfianza hacia nuestra pareja, puesto que tendemos a creer que se encuentra a la espera de la primera oportunidad que se le presente para abandonarnos.
Miedo a la soledad
No saber disfrutar de nuestra propia compañía nos conduce a imaginar un escenario de completa tristeza y desolación ante la eventualidad de que nuestra pareja decidiera irse con otra persona.
Consecuencias de los celos patológicos
Celar a nuestra pareja de manera constante y sin motivos no es algo gratuito, sino que existen diversas consecuencias que debemos tomar en cuenta antes de seguir ignorando este problema, el cual ya es una bola de nieve en permanente crecimiento.
En primer lugar, nos exponemos a que nuestra pareja se harte de la situación y decida ponerle fin a la relación. Y este paradójico resultado, ya que es exactamente lo opuesto a lo que buscábamos al celarla día y noche, podría ser el inicio de una serie de rupturas con nuestras próximas parejas, ya que difícilmente alguien que busque una relación armónica y equilibrada tolere un tumulto de celos descontrolados.
Por otra parte, quien padece celopatía puede llegar a ejercer violencia sobre su pareja al sentir que no puede controlar la angustia que le generan sus celos.
Cabe destacar que este trastorno, además de provocar irritabilidad, estrés y hasta depresión, nos conduce a disminuir nuestro rendimiento laboral, puesto que nuestra atención se encuentra focalizada en la fantasía de infidelidad que nos hemos creado. En consecuencia, no es de extrañar que una persona con celopatía termine perdiendo su empleo y retrasándose en los estudios.
¿Cómo se tata la celopatía?
Debido a que los factores que la desencadenan son múltiples, también lo son los tratamientos para mitigarla y, eventualmente, erradicarla. A través de las sesiones de psicoterapia, tu terapeuta trabajará contigo en la construcción de tu autoestima. Gracias a esto, pasarás a tomar consciencia del valor que tienes como persona.
Otro de los aspectos que se trabajan en las terapias psicológicas enfocadas a tratar la celopatía es el de aprender a dejar de depender de los demás y a desarrollar las habilidades para que puedas sentirte a gusto en soledad.
Las terapias para tratar la celopatía son muy diversas, por eso te proponemos que conozcas a nuestros psicólogos y que elijas aquel con el que más cómodo te sientas.
